«Ash vs Evil Dead»: nadie creía añorar la saga, hasta la vuelta de Ash
Hace unas semanas terminó la primera temporada de esta obra que sirve como secuela de la trilogía ochentera dirigida por Sam Raimi. Tanto seguidores de la saga como de la serie B se han puesto de acuerdo para alabar este retorno del mejor e inigualable Ash, acompañándolo en su lucha contra los deadites. Pero, ¿era necesaria? Definitivamente sí.
Como muchos críticos se han apresurado a decir, es una serie tonta, que no se toma en serio a sí misma, pero es ahí donde está su grandeza. Todo el espíritu de la serie B se encuentra en cada fotograma. Es una obra de bajo presupuesto, al igual que lo fueron las películas previas, cuya fuerza se encuentra en las situaciones absurdas, la violencia gratuita y en un idiota: Ash.
El personaje interpretado nuevamente por un Bruce Campbell que sigue en forma- me refiero a la hora de interpretar su papel por excelencia, por lo demás está hecho mierda- todavía es ese hombre infantil y patán, el típico que debería morir el primero pero por una serie de situaciones ridículas consigue salirse con la suya. Una parodia del ser humano que disfrutamos viendo, incluso empatizamos con ella, pero con la que jamás nos tomaríamos una cerveza. Es el antihéroe perfecto. Y nos encanta.
Bien, la buena noticia. Encontré un trozo de tarta sin sangre. ¿Alguien quiere un bocado?
La habilidad de Ash para no callarse nunca y soltar todo lo que le pasa por la cabeza sin filtro provoca las situaciones más cómicas de la serie. Para él todo es una fiesta. Es capaz de ligar con cualquiera o soltar chistes mientras le están atacando cuerpos poseídos. Y no porque sea valiente, sino por lo dicho, que es idiota.
Esta vez tiene unos jóvenes compañeros tan solitarios como él, que han encontrado en ese equipo de mata-deadites una razón para sentirse válidos, alejados de sus aburridas y míseras vidas. Ambos actores, Ray Santiago y Dana DeLorenzo, defienden muy bien sus personajes quitándole parte del peso en la conducción a Bruce Campbell pero sin hacerle sombra. Un casting muy equilibrado y que se compenetra a la perfección.
Serie B, Sam Raimi, los 80: Evil Dead
La serie, como decíamos al principio, es la perfecta y necesaria continuación de la saga Evil Dead, aunque en ningún momento se hace referencia a la tercera entrega. Quien haya visto estas películas, sabe lo que se va a encontrar en la serie: humor y sangre. Si aparece un personaje inocente, asustado o traumatizado, los guionistas le meterán el dedo en la llaga y echarán sobre él cubos de sangre, a modo de terapia de choque. Si alguien sobra, morirá. No hay remordimientos, pero se trata de una historia que en ningún momento la tomaremos como real o que podría suceder echándole un poco de imaginación. No, ni con mucha imaginación. Los que han trabajado en ella se lo han pasado genial contando la historia más loca que se les ha ocurrido, no esperéis algo filosófico, metafórico, o que abra conciencias. La historia se resume en: poseído -> chiste -> gatillo -> bang! -> sangre. Absolutamente genial.
Los efectos son regulares, pues hablamos de serie B, de poco presupuesto, pero no chirrían en ningún momento. Sigue utilizando técnicas de los ochenta- y un poquito de Paint, no nos vamos a engañar-, otra razón por la que se mantiene su espíritu original. Además, en ningún momento la historia es influenciada por las nuevas obras del género, o de zombies que tan de moda están. Es puro cine de los 80 y solo bebe de Evil Dead y Sam Raimi.
No han arriesgado en cuanto a la historia, pero nadie se lo pedía. Ash la jode y tiene que limpiar todo su estropicio. Sigue la estela de las antecesoras y está repleta de guiños a ellas, demostrando que había cosas que no estaban bien cerradas en la trilogía. No obstante, los continuos flashbacks ayudan a seguir la serie sin necesidad de ver las películas, aunque personalmente recomiendo hacerlo.
Tiene algunos capítulos más flojos que otros, pero se compensa con los buenos. Sin duda, el de la cafetería y en el que Ash alucina son lo suficientemente buenos como para hacerla imprescindible, aunque para mí lo mejor es el final de esta temporada- está confirmada la segunda aunque podría acabar la saga en el 1×10 perfectamente- por el cierre de la trama tan distinta a lo que nos podemos encontrar. Algo absurdo propio de Ash.
Pingback: “Ash vs Evil Dead”: nadie creía añorar la saga, hasta la vuelta de Ash | J. Justo Moncho()