«El Grinch»; Illumination mantiene sus virtudes como productora de animación en un relato navideño previsible y menos incorrecto de lo que podría demandarse

20 diciembre, 2018 Jose Asensio 0 comentarios Animación, Comedia, Comedia absurda, El Grinch, navidad, Scott Mosier, Yarrow Cheney

Nota:

Ernesto Alterio en la versión española y Benedict Cumberbatch en la original en inglés ponen voz a este Grinch menos incorrecto de lo deseado que busca seguir la estela de exitazos como la saga Gru, mi villano favorito aunque en clave navideña

Una de las adaptaciones más habituales de la bibliografía de Dr. Seuss es su malhumorado y solitario Yeti Verde llamado El Grinch que tras una versión en acción real poco estimable con Jim Carrey en la piel del monstruo que odia la Navidad; ahora el estudio de animación Illumination busca ofrecer otro éxito más allá de la saga Gru y Los Minions ofreciendo una historia navideña bastante previsible en su temática de felicidad y comunión aunque con la buena mano para el slapstick que el estudio animado ya ha demostrado de sobra en sus anteriores trabajos.

El pueblo de Villa Quién cada vez es más luminoso y ruidoso cuando llega las fiestas de Navidad; esta continua celebración desquicia al apartado y gruñón Grinch que para evitar esa ambiciosa celebración decide hacerse pasar por Santa Claus para fastidiar las fiestas al pueblo. Lo que el Grinch no sabe es que una niña llamada Cindy-Lou junto a sus hermanos y amigos ha decidido atrapar a Santa Claus para agradecerle la ayuda que le presta esa noche a su madre soltera.

Las dos tramas, la de la pequeña en Villa Quién y la preparación del plan para fastidiar la Navidad de El Grinch completan un relato de mensaje simple y lleno de navideña corrección sobre los valores de ésta que aún así resulta más estimable que la versión del 2000; en parte por el talento ya marca de la casa de Illumination para la comedia física y el slapstick. Destacando en este apartado a los ayudantes del verdoso gruñón; su fiel perro y un inocentón y bondadoso reno rechoncho que sin duda será la estrella de las risas de los más pequeños de la sala.