«¿Tenía que ser él?»; simplona comedia con un desfasado yerno llamado James Franco
Uno de los directores de la cantera Judd Appatow como es John Hamburg (Te quiero, tío) dirige aquí una comedia sobre el conocimiento de unos padres del nuevo novio de su amada hija universitaria. Una comedia alocada muy simplona que presenta unos James Franco y Bryan Cranston pasados de rosca.
Hamburg deja un impersonal sello en la dirección algo habitual en este tipo de comedias, donde el guión y el carisma de los intérpretes suelen se lo destacable: pero en esta comedia, realmente nada sale bien. Hamburg no aporta humanidad a los personajes, más bien una simplicidad de chiste que resulta de interés cero al espectador siendo muy previsible y dejando una comedia explícita y agotadora; basada en el lenguaje soez más que en frases ingeniosas o en gags logrados.
Una premisa que podía dar mucho más de sí y unos intérpretes pasados de rosca donde Bryan Cranston parece no saber hacia dónde mirar ante tan desfasado James Franco en frente y una mujer (Megan Mullaly) igual de liberada aunque quizás deja junto a Cranston uno de los pocos gags medianamente acertados del filme. Una comedia vulgar basada en el humor soez más que en una construcción ingeniosa del gag, aportando cero interés al espectador.