«Logan»; La despedida de un Lobezno vapuleado por la experiencia

Nota:

Aún sin ser un gran fan del universo cinematográfico de superhéroes, y más en especial de Marvel por parte de FOX, esperaba con cierta curiosidad esta cinta. Film protagonizado por un viejo Logan que trata de huir de su pasado junto con el profesor Charles Xavier y su compañero secundario, el también mutante Caliban. Una película que cierra la era de Hugh Jackman como el mejor Lobezno posible con esta tercera y última entrega de la trilogía del mutante más carismático de los X-Men. Después de las dos primera cintas James Mangold, director de esta última cinta (y también de Lobezno: Inmortal) lo tenía fácil para hacer una mejor película que las dos anteriores.

Recordemos en todo momento que hablamos de una adaptación de la obra de Mark Millar y Steven McNive, el cómic de Old Man Logan, y que será de obligada mención en esta crítica, salvando las distancias y entendiendo algunas de las dificultades a la hora de comparar. Una interpretación de la obra muy libre que tan solo coge el concepto de un Lobezno envejecido y de la extinción de los X-Men. Algo que a priori puede cambiar mucho el significado de por qué Logan ya no quiere seguir siendo Lobezno en una u otra obra. Mientras que en una ha escondido las garras para redimirse a la situación y convertirse en un ser humano más en otra no le cuesta ni cinco minutos volver a desmembrar cuerpos. Un punto importante a la hora de seguir llamando al personaje Logan o por el contrario Lobezno, y que esta cinta no respeta del todo. 

A pesar de las distinciones con la obra original, el largometraje gana calidad en comparación con los dos primeros proyectos spin-off de Lobezno. Aquí no vemos a nadie con mallas ridículas ni trajes llamativos. Este largometraje se sitúa como uno de los más adultos en el panorama de los superhéroes. Veremos a un Lobezno que tendrá que sobrevivir como puede ante la nueva realidad. Los superhéroes han quedado reducidos a páginas de cómics. De igual manera decir que algunos puntos pueden sorprender ligeramente y de igual manera otros tantos te pueden dejar algo frío y confundido.

La interpretación y caracterización de Hugh Jackman como el molido mutante es sobresaliente. Patrick Stewart vuelve a hacer un fantástico papel de Charles Xavier, esta vez con algunos matices a los que estamos acostumbrados que no hará otra cosa más que sumar puntos para que sintamos el paso del tiempo en el mundo de los X-Men. La incorporación de Laura (o X-23) provoca una relación tierna más que adecuada para el final de este sentimental final. Boyd Holbrook (conocido por su papel en Narcosrealiza un correcto papel como villano de turno, interpretando al líder de este grupo de mercenarios que perseguirán a este trío de contraste.

La música es un punto importante en esta entrega, y mucho más después de ver el mítico tráiler con la canción de Johnny Cash, Hurt. Desgraciadamente ésta no aparece en el montaje final y tampoco escucharemos nada parecido a este tono que habría aportado tanto al estilo de la cinta.

Aún así decir que algunas de las partes de la cinta son emocionantes y que el final, no siendo del todo inesperado, nos llega a emocionar. Una película obligada no solo para los fans de los X-Men, sino de todos los superhéroes. Esperaremos a ver la prometida versión monocromática del director para ver si así vemos la historia desde un tono (nunca mejor dicho) diferente. Sin duda un buen final para Hugh Jackman como el personaje que ya forma parte de su vida.

Javier Sólvez

Javier Sólvez López ha escrito 219 artículos en Ciempiés.

A %d blogueros les gusta esto: