True Detective II


Un nombre dañino

 

Fue una de las series revelación del 2014, siendo la favorita en muchos certámenes y llevándose numerosos galardones. Además, convirtió a miles de detractores en los mayores defensores de Matthew McConaughey. Hablamos, por supuesto, de True Detective, una arriesgada serie muy neo-noir que destacó por sus interpretaciones, dirección y cuidada fotografía. La mejor obra de la HBO de los últimos años.

A principio de este verano se estrenó la esperada segunda temporada cuyo argumento, reparto y dirección se renovaba para crear una serie nueva y no una continuación como estamos acostumbrados a ver en las series. Esta vez el reparto está compuesto por Colin Farrell, Rachel McAdams, Vince Vaughn, Taylor Kitsch y Kelly Reilly, todos con sus éxitos y fracasos en la espalda. Quizás el nombre que a priori a mí más me asustaba era el de Vince Vaughn ya que estamos acostumbrados a verle en las peores comedias de los últimos años, pero he de decir que me ha sorprendido gratamente.

TODO, sinceramente, todo me ha sorprendido. Para empezar, esta temporada nos presenta casos de corrupción política, nada de asesinatos en serie como la anterior, lo que conlleva un mayor desafío para el espectador, el cual con facilidad puede perderse en el mar de nombres que tiene su compleja trama. También la localización llama enseguida la atención, pues todo transcurre en un paisaje urbano e industrial, muy distinto al rural donde se encontraban McConaughey y Harrelson en 2014, por lo que la fotografía es muy diferente, que no peor.

La construcción del hilo conductor es el otro gran cambio. Ya no se trata de una narración a una cámara de hechos que sucedieron en épocas anteriores, ahora la línea temporal es cronológicamente «correcta», tiene su introducción, nudo y desenlace, perdiendo parte de la esencia y originalidad de la primera temporada.

Las interpretaciones y el guión, sobretodo los diálogos, sigue siendo lo mejor de la serie, donde encontramos al mejor Colin Farrell y a un sorprendente Vaughn que clava su papel de mafioso duro y a la vez tierno con sus más cercanos.

Como habréis apreciado, prácticamente todo es bueno pero esta temporada ha tenido críticas de todo tipo. ¿Por qué? Pues muy sencillo: por el nombre. True Detective II estaba condenada con ese título a competir con la obra maestra que fue la original y eso es muy duro. Sin embargo, obviando el nombre de la serie, estamos ante un buen producto del género neo-noir que disfrutará cualquiera que lo hizo con la primera temporada, pero siempre y cuando decida no comparar, pues esto es otra serie totalmente distinta pero con la esencia de lo que el título quiere hacer referencia: quieren mostrar a reales detectives.

A parte de esto mencionado, la mayor pega es la construcción de los personajes, los cuales se les ha llenado de oscuros secretos y traumas, convirtiéndolos en poco reales y dificultando la empatización. Son personajes grotescamente exagerados, casi caricaturas en las que todo lo que les pueda haber pasado malo en su vida, les ha pasado.

Pues eso, la serie sigue siendo una gran obra, pero no tan sobresaliente. Sigue teniendo una genial bso, fotografía, geniales diálogos, actuaciones, dirección, escenas de acción (especialmente la del capítulo 4) y un final muy destacado. No tengais prejuicios y olvidaos de la temporada anterior, así podréis disfrutar de este producto que esperemos que de paso a otros más aun teniendo el mismo nombre.

J. Justo Moncho

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