Festival de San Sebastián 2018 – DÍA 1
Juan Vera, Marcelo Martinessi, Ryûsuke Hamaguchi, Jafar Panahi y Louis Garrel
Tras pasar a recoger las acreditaciones y tomarnos un obligado café mañanero, empezábamos nuestra particular ruta maratoniana por estos días de cine con sorprendente buen pie, y cuando digo que el inicio del Festival nos sorprendió es porque es algo bien sabido que la película que abre cada año la Sección Oficial suele ser bastante mediocre, tirando a mala. Aun así, este año hemos tenido que comernos nuestras expectativas, pues El amor menos pensado, ópera prima del productor Juan Vera (que participó en obras del calibre de Zama, de Lucrecia Martel), ha resultado ser bastante mejor que la media de películas inaugurales. Pequeño apunte: en la cola para entrar al abarrotado Kursaal 1, nos hemos encontrado con el maravilloso Mamoru Hosoda, quien mañana presentará en la sección Perlas su nueva película, la muy esperada Mirai.
La película argentina ha resultado ser una comedia asequible pero a la vez elegante, de corte clásico pero con algunos momentos de diálogo brillantes. La pareja de ases protagonistas, Mercedes Morán y Ricardo Darín (tan habitual en el Festival), brillaban en sus interpretaciones, por mucho que ambos cayeran a cada poco en los lugares comunes de la comedia romántica (citas fallidas, novias más jóvenes-ergo-estúpidas, la madre re-enamorada, etc.). Como bien anuncian en un momento de la película, a los argentinos se les da muy buen la ironía, lo que da sentido a una película un tanto desangelada en su aspecto dramático, pero que funciona muy bien como acumulación de tiroteos de réplicas perspicaces.
A las 12:30 teníamos cita al cine Trueba para asistir al primer pase de Las herederas, de Marcelo Martinessi, también primera película del paraguayo, que la pasada Berlinale ganaba el Oso de Plata a Mejor Actriz (para la inmensa Ana Brun), el Premio Alfred Bauer (a la Mayor Contribución al Cine Alemán) y el Gran Premio de la Crítica. Con tanto premio, lo único que quedaba por hacer era comprobar si realmente era tan buena. Y sí. Partiendo de una premisa arriesgada (una “sesentona” lesbiana debe empezar una vida sola, al ingresar su pareja en prisión), Martinessi hace maravillas con la dirección, el montaje y el sonido, y transforma el viaje existencial de su protagonista en toda una experiencia cerebral para el espectador. Aunque a veces esta impecable sutura de tintes martelianos se vea un poco demasiado perfecta, hasta un poco descarada, sí, lo vale.
Buena racha teníamos al llegar la hora de comer, así que la película de las 16:00 tenía que ser buena, sí o sí – primero, porque esa hora es crítica para ver cualquier cosa y, segundo, porque ya veníamos de dos buenas cintas. En este caso, el reto ha sido para Ryûsuke Hamaguchi y su Asako I y II (Netemo sametemo en japonés, de traducción literal “aunque duerma, aunque esté despierta”), la historia de amor entre la homónima protagonista, Asako (Erika Karata), y un tipo que se parece muchísimo físicamente a su desaparecido amor de juventud. La propuesta ha dejado dividida a la sala – charlando con los presentes, comprobabas cómo los que la habíamos disfrutado más partíamos del planteamiento de que era una comedia pura y dura, mientras que a los defensores del drama les había costado toda la película entrar en la historia. Un argumento que bien hubiese podido confeccionar el guionista y dibujante de manga Inio Asano (Buenas noches Pun Pun), pues está protagonizado por un personaje con el que es prácticamente imposible empatizar debido a sus pésimas decisiones en la vida. Decisiones que han suscitado muchas carcajadas esporádicas pero ninguna con un mínimo de quorum ni continuidad.
No nos hemos movido de sala para ver lo nuevo del director de Taxi Teheran, Jafar Panahi, 3 faces, que ganó el Premio a Mejor Guion en el pasado Festival de Cannes. La cinta retrata tres generaciones de actrices (la aprendiz-debutante, la establecida y la retirada) a través de un viaje por los distintos dioramas que conforman un pequeño pueblecillo abandonado en medio del campo iraní. La historia, que comienza con un vídeo de una chica ahorcándose, lleva al mismo Panahi y a su actriz principal, Behnaz Jafari, a buscarla hasta su pueblo natal – búsqueda que desencadenará esa sucesión de retratos docuficcionales que caracteriza todo el cine del director iraní. Muy recomendable para amantes de la fina ironía desprendida de un costumbrismo exacerbado, pero si no os gustó la trayectoria anterior de Panahi, lo mejor es abstenerse completamente.
A nuestra última película, hemos llegado con dificultades, porque la proyección de 3 faces iba con un poco de retraso y no hemos querido perdernos ni un minuto de esta maravillosa comedia noir iraní. Sudados y empapados por la terrible humedad del atardecer donostiarra, hemos llegado al Principal (a medio minuto de empezar, sí, porque nos gusta el riesgo) para disfrutar de una propuesta muy poco en la línea trash de nuestra llegada. Efectivamente, estamos hablando de la muy francesa L’homme fidèle, dirigida y protagonizada por Louis Garrel, con guion del mismo junto a su ya habitual colaborador Jean-Claude Carrière (también detrás del Amante por un día). Louis Garrel es muy consciente de su estatus de dandi francés, así que explota su faceta más atractiva (que no necesariamente ligona), para construir una historia de amor, desamor y sospechas en clave cómica, casi nouvellevaguiana. Un triángulo amoroso entre Lily-Rose Depp, Laetitia Casta y el mismo Garrel que empieza con el burbujeo del buen champán y va destemplándose un poco cuando el dispositivo de narración se hace más evidente y repetitivo. Nos quedamos con una referencia, una petición y una moraleja: la referencia, Jules y Jim, cómo no; la petición es que queremos más Laetitia Casta en nuestras vidas; y la moraleja, «no te fíes nunca de un crío con pintas de detective».
Eso es todo por hoy, queridos amigos. Mañana tendremos primeras impresiones de Apuntes para una película de atracos (León Siminiani), El reino (Rodrigo Sorogoyen), Mirai (Mamoru Hosoda) y quien sabe si nos dará tiempo a llegar a Querido Fotogramas (Sergio Oksman). Seguiremos informando.
