¿Valoramos a Kevin Spacey como actor o como depravado?
Muchos son los casos que han salido a la luz sobre acoso sexual en la industria cinematográfica, pero solo Kevin Spacey goza de legión de defensores
¿Qué está pasando en Hollywood? Bueno, mejor dicho, qué «ha estado» pasando, pues esto lleva tiempo oculto y es ahora cuando al fin está saliendo a la luz. Hablo, por supuesto, de las noticias sobre los acosos sexuales que han sufrido muchas personas por parte de nombres importantes de la industria cinematográfica, tanto de productores, directores o actores de renombre. Esto no es algo aislado obviamente, ocurre desgraciadamente en muchas industrias en las que una persona con cierta autoridad se aprovecha de ésta con fines depravados.
No obstante, de todos estos supuestos casos (Weinstein, Von Trier -vale, de hollywoodiense tiene poco-, Seagal, Hoffman, Piven…) quiero hablar hoy del de Kevin Spacey por una simple razón: la cantidad de mensajes de gente que decide obviar sus acciones en pro de alabar su carrera actoral y apoyar ésta. Sí, las redes se han inundado de mensajes que, siendo cierto que repudian estos sucesos, hacen un llamamiento para que el resto se una a su clan y deje de mirar a Spacey como persona y lo vea únicamente como actor.
¿Hay que separar la vida personal de la profesional?
¿Pero estamos gilipollas? Hay que separar si alguien te cae mal, obviamente, pero hablamos de delitos graves. Es más, el caso de Spacey es especial porque su depravación llega al extremo de haber acosado, entre muchas otras personas, a un chaval de 14 años -todo supuestamente y con mil comillas hasta que se esclarezca, claro, pese a que él no ha negado nada y sí se ha disculpado-. Es SUPUESTAMENTE «un puto pederasta».
Netflix lo ha despedido y a muchas personas parece que le ha sentado mal la decisión porque es buen actor. ¡Pues claro que es buen actor! Yo he disfrutado de muchos de sus trabajos, por no decir la mayoría. Ahora bien, desde que me enteré de la noticia también digo que no pienso volver a invertir mi tiempo y mi dinero para ver su trabajo y premiar a una persona así. ¿Si Kevin Spacey en lugar de actor fuera el mejor electricista del mundo lo contratarías?
Desde aquí aplaudo la decisión de Netflix y espero que muchos le sigan hasta que la conducta se haya erradicado tanto en la industria como en la propia persona de Spacey, pues creo igualmente en la reinserción. Pero claro, la reinserción tras un periodo de penitencia y reforma, no tras reirle las gracias, aplaudirle y mirar a otro lado.
No seamos estúpidos. Si se quiere hacer un favor al cine y la televisión, estos comportamientos no se deben obviar.
Dicho esto, me gustaría lanzar una última pregunta relacionada aunque alejada de lo que ciertamente importa: ¿por qué no seguimos House of Cards con Claire Underwood?
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