Un mensaje de esperanza
Después de varios días internada en un hospital de Los Ángeles por un fallo cardíaco, Carrie Fisher ha fallecido a los 60 años.
En estas fechas se han sucedido las muestras de apoyo de todo el mundo, entre las que destacan las de sus compañeros de reparto Mark Hamill, Harrison Ford y Peter Mayhew, que dio vida a Chewbacca.
La intérprete, hija del cantante Eddie Fisher y de la actriz Debbie Reynolds, encarnó el mítico personaje de la Princesa Leia en Una nueva esperanza (1977), El Imperio contraataca (1980), El retorno del jedi (1983) y El despertar de la Fuerza (2015) y estará siempre en el imaginario colectivo como un icono indiscutible del cine, que ya es decir; pero su carrera no acabó ahí. Participó en comedias definitorias de los años 80 como Hannah y sus hermanas (1986) de Woody Allen o Cuando Harry encontró a Sally (1989) de Rob Reiner. Además de un épico cameo en The Big Bang Theory, compartido con James Earl Jones, la voz americana de Darth Vader.
Aunque lo que el gran público quizá desconozca es su faceta de escritora y guionista. Su novela Postales desde el filo ha sido llevada a la gran pantalla, adaptada por la propia Carrie Fisher, por Mike Nichols –¿Quién teme a Virginia Woolf? (1966), El graduado (1967)- en 1990.
Después de unos años oscuros en los que las adicciones y los traumas del pasado fueron más fuertes que ella misma, la actriz consiguió salir adelante. Y mucho se escribirá ahora sobre ese periodo; la miseria, cuando es ajena, vende, no se engañen. Pero no aquí. No hoy. Hoy olvídense de eso, que ya se encargarán otros, más adelante, de bombardear su tiempo con sensacionalismo. Hoy debemos recordarla como la beligerante miembro de la realeza galáctica que formó parte de la saga más influyente de la historia del cine, como la actriz secundaria que bordaba sus papeles en algunas de las mejores comedias de toda una década. Debemos recordarla como intérprete, como icono. Debemos recordarla, sin más.
Leia, Carrie Fisher, que traía un mensaje de esperanza para todos, nos ha dejado, pero nunca podremos olvidarlos. Nunca podremos olvidarla.