«Wheelman»; Frank Grillo y Netflix se marcan un «Locke» más convencional y efectista
Efectivo debut de Jeremy Rush con Wheelman, donde destaca el interesante trabajo de cámara que jamás sale del coche
El actor Frank Grillo (The Purge, Infierno blanco) busca hacerse en Wheelman un (casi) “One Man Show” en esta cinta con claras similitudes a la protagonizada por Tom Hardy, Locke. Aunque con más acción y menos rigurosa en su montaje y en un guión más melodramático y efectista.
Un hombre que parece realizar un trabajo de huida para unos atracadores recibe una llamada desconocida de un hombre al que deberá seguir las órdenes mientras busca ingeniárselas para adivinar su identidad y de paso arreglar una situación conflictiva con su hija.
Un hombre, un coche y llamadas telefónicas; mismos elementos que en la ópera prima de Steven Knight, en la que Tom Hardy mostraba todo su talento interpretativo en un brillante soliloquio encerrado en ese coche (sigue siendo uno de sus trabajos más loables). Aquí es Frank Grillo, quién aunque brillante dentro de una filmografía muy enjundiada a la acción y papeles físicos, puede demostrar que es un eficiente actor en tramas más dramáticas, aunque el guión no tenga la profundidad psicológica y humana que si tenía la notable Locke.
Jeremy Rush debuta con eficiencia ofreciendo un trabajo escénico interesante para Netflix, aportando una puesta en escena en la que la cámara jamás sale del automóvil; viendo ciertas situaciones violentas o dramáticas desde lejos. Un trabajo de cámara a destacar que podría haber resultado más memorable si el guión no resultara efectista por momentos y los dramas que propone resultan ya convencionales; descendiendo nuestro interés frente a la intensidad que este thriller hubiera necesitado.